Calimaya se ha convertido en otro municipio mexiquense donde, desde que inicio este año, se han registrado diversos homicidios.
El primero de ellos se registró el miércoles 15 de enero, un hombre que se desempeñaba como guardia de seguridad de una mina fue asesinado a tiros, los hechos ocurrieron en las calles Miguel Hidalgo en San Andrés Ocotlán donde se ubica la mina conocida como La Estrella.
Posteriormente, el 20 de febrero, dos mujeres que viajaban en un taxi fueron heridas con un arma de fuego dentro del vehículo. Lamentablemente, una de ellas falleció por la gravedad de los impactos; la otra mujer fue trasladada a la clínica 251 del Instituto Mexicano del Seguro Social. Este hecho sucedió en la plaza principal de la comunidad Zaragoza de Guadalupe.
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El caso más sonado en el municipio de Calimaya, fue el de Félix Hernan el menor que fue encontrado sin vida el tres de mayo en un camino de terracería cercano a la carretera San Marcos-Zacango, en el poblado de San Marcos de la Cruz.
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Durante junio la violencia siguió sin dar tregua: el domingo 14 , vecinos de la zona aledaña al paraje La Palma localizaron el cadáver de un hombre, cuyo cuerpo presentaba heridas producidas por arma de fuego.
Casi un mes después, el jueves 16 julio, un hombre de aproximadamente 30 años fue hallado muerto en la carretera Calimaya-San Lorenzo, en el paraje de las minas.
Entre las víctimas también estuvieron servidores públicos: el 24 de agosto, un trabajador del Ayuntamiento de este municipio fue encontrado sin vida en una gasolinera ubicada sobre el camino a San Marcos de la Cruz. El hombre de 27 años de edad estaba abasteciendo de combustible su vehículo cuando dos sujetos se acercaron a dispararle.
En tanto el pasado cuatro de septiembre, fue localizado atado de manos y calcinado, el cuerpo de un hombre en la calle Valle del Nevado esquina con Parque San Agustín.
Hasta el momento, las autoridades encargadas de la seguridad de Calimaya no han reforzado operativos o rondines con la finalidad de disminuir dicho delito, o realizar la detección de posibles implicados en los asesinatos los cuales en su mayoría fueron con violencia.