Personal médico que atienda la crisis sanitaria por COVID-19 en Toluca ha sido discriminado al menos por los chóferes del transporte público, ya que no les hacen la parada. Su situación es complicada pues a pesar de arriesgar su salud al cumplir con su deber temen que las personas les agredan en las calles, debido a la desinformación y el pánico que muchos ciudadanos padecen al leer noticias falsas.
Lorena, enfermera que trabaja en el Hospital Materno Infantil del Issemym (el nombre ha sido modificado para conservar en el anonimato de nuestra testigo), ya se ha enfrentado a estas situaciones.
El pasado 3 de abril, horas antes de que Mónica Maccise, titular del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), dijera que había aumentado la incidencia de actos discriminatorios o violentos contra personal de la salud, Lorena tuvo que abordar un taxi para llegar a su centro de trabajo porque dos de los camiones a los que les hizo la parada anteriormente, no se detuvieron.
El pasado 3 de abril Lorena tuvo que abordar un taxi para llegar a su centro de trabajo, porque dos de los camiones a los que les hizo la parada no se detuvieron.
“Vengo de Xonacatlán, mi hora de entrada es a las dos. En otras condiciones, no tengo mayor problema para llegar al Materno: un camión me deja y otro me lleva. Pero con el COVID-19 las cosas se han puesto difíciles para nosotras”, dice Lorena, quien trabaja en el área de cuneros del Hospital Materno Infantil del Issemym, ubicado en la vialidad Alfredo Del Mazo, a quince minutos del centro de Toluca. Este hospital es uno de los seis que, en un primer momento, el gobierno estatal destinó al tratamiento de pacientes con coronavirus.
“Ahorita no hay tanto trabajo porque como este es un hospital COVID, están enviando pacientes al Hospital Regional de Toluca [Nicolás San Juan]; además, por la temporada, algunos compañeros están de vacaciones”. Pero después de Semana Santa, cuenta Lorena, la carga laboral se incrementará, pues durante las vacaciones habrá gente que enferme y, además, según las estimaciones de las autoridades de la Secretaría de Salud federal, los días más críticos de la pandemia podrían llegar para mediados de abril e inicios de mayo.
En Jalisco, una de las entidades donde se han registrado más agresiones contra el personal de la salud, la Comisión Interinstitucional de Enfermeras del Estado de Jalisco (CIEJ) ha recomendado que cuando las enfermeras y enfermeros vayan a sus centros laborales o cuando salgan de ellos utilicen ropa de civil para evitar que los agredan.
Como en otros casos de violencia, la “solución” tiene que venir por parte de los violentados, son ellos quienes tienen que cuidarse de no provocar al agresor. Las víctimas, por su parte, han incorporado de manera inconsciente este precepto, Lorena, ahora antes de abordar un camión se abrocha bien la chamarra para esconder un poco el color de su uniforme.