La diputada de Morena Beatriz García Villegas denunció ante el Tribunal Electoral de la entidad y ante la Contraloría del Poder Legislativo a su compañero de bancada, el legislador Faustino de la Cruz Martínez, por violencia política de género.
García Villegas pidió a ambas instancias que revisen el caso, luego de que en la sesión del pasado 29 de septiembre, durante el debate de la reducción de regidores y síndicos, el diputado hizo alusión a que votan de acuerdo con la línea que marca su líder Daniel Serrano, con quien no congenia una parte del partido – Serrano es líder de “Los Puros” y las diputadas Elba Aldana, Beatriz García y Alicia Mercado forman parte de ese grupo.
Durante la sesión, quien expuso las críticas al dictamen, en torno que no había cifras claras de ahorros, ni de los beneficios que tendría la reforma fue la diputada Elba Aldana; posteriormente subió el diputado Faustino de la Cruz para señalar que hay quienes no estaban de acuerdo con la línea de Daniel Serrano y verían el tema en sus instancias internas.
Vinieron otras intervenciones y después del coordinador morenista Maurilio Hernández subió la legisladora Beatriz García para señalar que De la Cruz había cometido violencia política contra Aldana, pero quien denunció fue Beatriz García.
Faustino de la Cruz reviró en la sesión que no se escudarán en temas de violencia, pues el asunto era de congruencia y de disciplina.
García, junto con sus compañeras Elba Aldana y Alicia Mercado, tuvieron una postura distinta a la del resto de la bancada de Morena, pidió respeto y que no las minimicen por ser mujeres, pues dijo que tienen suficiente capacidad para tomar sus propias decisiones, y advirtió que los comentarios del diputado morenista podrían significar violencia política.
Debido a que la pelea central era entre el PAN y Morena, el coordinador panista Anuar Azar aprovechó para expresar su apoyo y fungir como testigo de la supuesta violencia política que a su juicio cometió el legislador, quien de inmediato subió a tribuna para aclarar que no era violencia política, sino fijar una postura clara de las razones que tiene cada uno para votar a favor o en contra.
Además, este miércoles, la legisladora, acompañada de diputadas federales y locales que forman parte de su grupo, se apostó frente a la Cámara con una gran manta en la que denunciaban violencia política de género y algunas pancartas con el violentómetro.
En ese sitio subrayó que no puede dejar pasar este acto, no por un tema personal sino de lucha de todas las mujeres que son violentadas en el espacio público y político, porque no está dispuesta a quedarse callada y dejar impunes estos actos.
“No es un acto para defender a Beatriz, es un acto que debe dejar un precedente, que las mujeres en la vida política y pública sabemos tener decisiones, pensamos por nosotras mismas. Los espacios no son una cuota política, es un instrumento que nos hemos ganado con la Historia. Hoy no nos representamos a nosotras, representamos a una comunidad, que esperamos que hagamos una transformación real” señaló.
Al micrófono, junto a quienes la acompañaron para presentar las denuncias, dijo que la Cuarta Transformación tiene que estar del lado de las mujeres o no podrá llegar a ningún lado.
Señaló que este caso no es aislado, pues a partir de él regidoras le han escrito y se han sumado a su lucha para hacer evidente que en los palacios municipales también se vive violencia política, también se está reprimiendo a las mujeres.
La denuncia, señaló, es el primer paso para evidenciarlo y más en la Casa del Pueblo, donde se debe poner el ejemplo y respetar la ley.
Las asistentes corearon varias veces “calladitas no” y caminaron a la Contraloría para interponer la segunda denuncia y defender sus derechos.
En entrevista señaló que los hechos quedaron grabados en la sesión del 29 de septiembre y subrayó que nadie tiene por qué minimizar a una mujer y pensar que detrás de sus decisiones está otra persona. También informó que ya acudió al Tribunal Electoral para que revisen el caso.
Estuvieron con ellas sus compañeras de bancada en el Congreso local, con quien conforman parte de una corriente identificada como “las Puras”, por ser parte de quienes empezaron en Morena, sin provenir de otra fuerza política y las diputadas federales Elizabeth Díaz y Laura Guerra, de la misma corriente.
Este no es el primer desencuentro que tienen con el resto de la bancada por el tipo de votaciones que hacen, muchas veces de manera distinta, con diversos argumentos que presentan en el pleno o en los trabajos en comisiones.
En esta sesión la legisladora recriminó a sus compañeros que el apoyo del PRI para sacar adelante esta iniciativa del senador Higinio Martínez Miranda, fue una moneda de cambio para aprobar al gobernador la reestructura del gobierno estatal.
Se defiende De la Cruz
A través de un video Faustino de la Cruz hizo un pronunciamiento donde señaló que esos actos son difamatorios y de calumnia, pues su posicionamiento no tenía ninguna connotación de violencia política. Consideró que el tema es por cuestiones electorales de un grupo incrustado en Morena y afirmó que él da la cara y seguirá trabajando.
En otro video, Elizabeth Millán también de Morena, y antes del grupo de «Los Puros» destacó que el legislador es congruente y los señalamientos que le atribuyen no fueron de violencia política.